Se describe un síntoma que puede ser producido por diferentes enfermedades (hipotiroidismo, divertulos, etc), por la ededad o el embarazo. En estos casos hay disminución de la frecuencia de la defecación y endurecimiento de las heces. Se deben consumir dietas ricas en fibras, tomar mucho líquido, hacer ejercicio y consultar con el médico para que diagnostisque la causa de este síntoma.