Cuando la mujer tiene un aborto espontáneo generalmente deja pasar un tiempo antes de intentar nuevamente quedar embarazada y cuando lo logra, a las pocas semanas pierde nuevamente el embarazo nace en ella un sentimiento de angustia, al ver que nuevamente se ve frustrado su deseo de ser madre. Ante cada pérdida debe sobreponerse al período de duelo que produce un aborto espontáneo.
Cuando una mujer tiene 3 o más abortos espontáneos en forma sucesiva, se lo llama “aborto recurrente”.
Aborto recurrente primario: la mujer no tuvo ningún embarazo con feto vivo.
Aborto recurrente secundario: la paciente tuvo al menos un embarazo que terminó con un feto vivo.
Causa desconocida: en la mayoría de los casos, algunos trabajos indican el 50%, no se puede establecer la causa porque las partes embrionarias se eliminan antes de hacer el raspado evacuador, lo que permite obtener material para analizar.
Falla de la fase lútea del ciclo: hay menor producción de progesterona, hormona que protege el embarazo.
Malformaciones uterinas: pueden ser congénitas o adquiridas como las adherencias intrauterinas, que se forman después de un raspado evacuador.
Cirugías tubarias: pacientes que han tenido un embarazo ectópico, o cirugías por esterilidad.
Miomas: llamados fibromas, que actúan como factor mecánico disminuyendo la cantidad de sangre que irriga al útero, o bien producen contracciones uterinas que determinan la expulsión del feto.
Incompetencia cervical: el cuello del útero se dilata sin que haya contracciones. En el embarazo normal el cuello uterino forma un anillo fuerte que impide que el bebé sea expulsado.
Endometriosis: el tejido que reviste la cara interna del útero y que se elimina durante la menstruación, se desarrolla fuera del útero. Se cree que la endometriosis hace que las pacientes tengan toxinas o produzcan mayor cantidad de prostaglandinas, que son sustancias que intervienen en las contracciones uterinas.
Factores inmunológicos: algunas presonas producen proteínas (anticuerpos) que en vez de protegerlas contra las infecciones destruyen sus propios tejidos, lo que les producen las llamadas enfermedades autoinmunes. Entre el 3% y el 15% de los abortos recurrentes son causados por anticuerpos “antifosfolipídicos”.
Alteraciones cromosómicas
Infecciones del tracto genital: las infecciones por Chlamydia Tracomatis pueden ser la causa de que las mujeres tengan abortos en forma repetida.
Factores ambientales: la exposición a agentes químicos como el arsénico, plomo, óxido, etc. pueden producir abortos.
Tabaquismo: hay trabajos científicos que refieren mayor cantidad de abortos en mujeres fumadoras.
Aproximadamente el 50% de las mujeres que han tenido un aborto espontáneo, pueden tener un embarazo normal cuando intentan nuevamente quedar embarazadas, si bien en el caso de los abortos recurrentes la posibilidad de tener otro aborto es del 45% al 50%.
Los casos en que hay un déficit de progesterona son los más fáciles de solucionar, seguido por la corrección quirúrgica de las malformaciones uterinas.
Un factor importante a tener en cuenta cuando una pareja se enfrenta con la pérdida de varios embarazos en forma consecutiva es la parte emocional, que con mucha frecuencia tarda más tiempo en recuperarse que la parte física. Las parejas que atraviesan por esta situación deberían hablar con su médico, quien evaluará la conveniencia de la consulta psicológica ya sea individual o grupal.
Comparato, Ginecología en Esquemas 3ª edición
[by: Dra. Marinés Camero]