• Cambios en la Piel

A medida que crece el bebé dentro de la panza el embarazo se empieza a notar y la mujer percibe cambios en la forma de su cuerpo. Pero también la piel de la embarazada refleja los cambios hormonales que hay durante la gestación.

Pueden aparecer manchas producto de la mayor acumulación de "melanina" (pigmento celular de color negro o parduzco, que le da el color a la piel humana), en ciertas regiones del cuerpo (cara, mamas, línea media del abdomen, vulva y cicatrices anteriores). Los lunares ya existentes se oscurecen Algunas embarazadas tienen manchas oscuras en la cara, llamadas "cloasma gravídico" o "melasma".

El cloasma se presenta como manchas oscuras en las mejillas, en la frente y labio superior, de ahí el nombre de "máscara del embarazo", que intensifican su color cuando la embarazada se expone al sol. Las mujeres de piel oscura son más susceptibles para sufrir estos cambios en la pigmentación.  En la mayoría de los casos las marcas desaparecen después del parto.

Todas las mujeres tienen en la línea media del abdomen, entre el ombligo y el pubis, una línea invisible llamada "línea blanca o alba", que se oscurece durante el embarazo, llamándose "línea nigra". Una vez que termina el embarazo desaparece de a poco.

Este aumento de la pigmentación en algunas zonas de la piel de la embarazada se producen por efecto  de las hormonas propias de la gestación, que aumentan la producción de melanina. Esta teoría parece confirmarla el aumento de pigmentación que aparece en mujeres que toman pastillas anticonceptivas. La hiperpigmentación es más marcada en algunas zonas como la aréola del pezón, formándose alrededor de ésta una "aréola secundaria". Una vez que termina el embarazo los niveles hormonales disminuyen a los valores anteriores al embarazo, por lo tanto también disminuyen los niveles de melanina y de a poco desaparece la pigmentación.

No es raro que la embarazada muestre un rostro más saludable

Otra preocupación de las embarazadas son las "estrías" que aparecen en la zona del abdomen, las mamas y los glúteos. Son marcas o cicatrices ligeramente profundas, de color rosa o rojizo, que se producen por la ruptura de las fibras elásticas de la dermis al distenderse la piel por el aumento de volumen. La aparición de estrías está relacionada con una predisposición genética, ya que muchas mujeres refieren que sus madres también las tuvieron durante el embarazo. También hay una asociación entre la aparición de estrías durante el embarazo y el color de piel, ya que es más frecuente que las tengan las mujeres de piel oscura.

Tanto el aumento de la pigmentación como las estrías suelen aparecer en el segundo y tercer trimestre del embarazo.

Algunas embarazadas durante la gestación tienen "ácne", que suele aparecer desde los primeros meses de embarazo.

Para evitar o disminuir la intensidad de las manchas de la piel conviene evitar el sol y usar fotoprotectores.

Las estrías se previenen no aumentando mucho de peso. Otra forma de disminuir la posibilidad de desarrollar estrías es mediante masajes en la piel con cremas cuya fórmula contenga "centella asiática", vitamina "E", "colágeno" y "elastina". Es importante que la dieta contenga vitamina "C" y cobre, porque éstos ayudan a reconstituir el colágeno y mejoran el tejido que no está dañado. Se recomienda come germen de trigo, lácteos, huevos, cereales, hígado, frutas (especialmente cítricos), verduras de hojas verdes, aceite de oliva extra virgen, soja y carnes magras.

por Dra. Marinés Camero