El 20% al 255 de las mujeres que son infértiles tienen problemas de ovulación, ya sea porque tienen menstruación pero no ovulan o porque tienen escasos ciclos con ovulación. El síndrome de ovarios poliquísticos es una causa importante de ciclos sin ovulación, es decir "anovulatorios". Las alteraciones del ciclo menstrual pueden variar desde la amenorrea hasta la oligomenorrea, aunque lo más común es que la mujer menstrúe cada 28 a 30 días, pero los ovarios no forman óvulos (ciclo anovulatorio mediano).
Para comprender mejor la causa del "factor ovulatorio", es útil conocer como funciona el ovario cuando ovula.
La "ovulación" es la liberación de un óvulo (célula femenina) por parte del ovario; éste es conducido a través de la trompa de Falopio donde podrá ser fecundado por un espermatozoide (célula masculina). Si se produce la fecundación el óvulo fecundado continúa su camino hasta llegar hasta el útero, donde se implanta a los siete días.
La ovulación depende de que haya una adecuada secreción de hormonas, especialmente las que produce la glándula hipófisis. Ésta elabora dos hormonas que son la FSH (hormona folículo-estimulante) y la LH (hormona luteinizante) que se necesitan para que los ovarios fabriquen suficientes estrógenos para que se produzca la "ovulación".
Esto explica porque los trastornos hormonales son una causa importante de fallas de la ovulación.
En el folículo ovárico después que se expulsa el óvulo se forma el "cuerpo amarillo", formación glandular que vista con el microscopio tiene color amarillo, y cuya función es producir una hormona llamada "progesterona". Esta hormona prepara el endometrio (capa interna del útero) para recibir al óvulo en el caso de que haya sido fecundado.
Hay estudios simples y otros más complejos que permiten al médico saber si una mujer ovula y son los siguientes:
Temperatura Basal Corporal: es el estudio más simple que se usa para saber si una mujer ovula. Se debe tomar la temperatura rectal antes de levantarse, después de algunas horas de reposo, y se anotan los valores cada día. Conviene hacerlo durante tres meses para poder hacer un gráfico que indica las variaciones de la temperatura basal corporal.
Dosajes de hormonas: se pueden medir las siguientes hormonas para estudiar el factor ovulatorio 1) LH: se mide esta hormona en orina o en sangre. En la actualidad esta prueba se realiza con tiras que permiten a la paciente medir el nivel de LH en una muestra de orina. El pico de esta hormona estimula al ovario para que se produzca la ovulación. 2) FSH 3) Prolactina 4) Hormonas tiroideas (TSH; T4, T3) 5) Anticuerpos tiroideos 6) Testosterona 7) Estradiol 8) Progesterona.
Moco cervical: la observación del moco cervical ayuda para saber cuál es el período fértil de la mujer.
Ecografía ginecológica: permite ver los ovarios que pueden tener múltiples folículos pequeños cuando no hay ovulación, o bien observar las modificaciones que sufre el ovario una vez que se produce la ovulación.
Biopsia de endometrio: se toma una muestra de tejido del endometrio, dos o tres días previos a la fecha en que se espera que la mujer menstrúe, y se manda al laboratorio para que la estudien con un microcopio. Este estudio permite ver el efecto de la progesterona sobre el endometrio, y determinar si la paciente tiene una fase lútea normal.
Para tratar estos problemas se utilizan drogas que estimulan al ovario para que se produzca la ovulación (clomifeno, gonadotrofina menopáusica humana, FSH purificada, etc). Se deben hacer bajo control médico, para evitar que se estimule en forma excesiva los ovarios (hiperestimulación ovárica).
BIbliografía: Dr. Gori, Jorge - Dr. Loruss Antonio- Ginecología de Gori - Editorial El Ateneo - 2ª edición
Dr. Comparato,Mario - Ginecología en esquemas - Editorial El Ateneo - 3ª edición