El día de la ovulación o un poco antes se produce un aumento de la temperatura del cuerpo, producido por el aumento de los niveles de progesterona.
La temperatura se debe tomar todos los días antes de levantarse, después de un período de descanso de 6 horas como mínimo, por eso se llama temperatura basal.
Después de la ovulación la temperatura corporal, aumenta 2 a 3 décimas por el efecto de la progesterona producida por el "cuerpo amarillo" del ovario. Para estar segura de que ya ovuló, la mujer debe contar 3 días consecutivos de temperatura elevada.
La temperatura se puede controlar en el recto, la vagina o la boca. Se aconseja el control durante 3 ciclos para hacer el promedio del día del ciclo en que se ovula.
La abstinencia sexual se debe hacer durante 5 días antes de la fecha en que se ovula y 3 días después.